La isla de Hawái está compuesta de diversos volcanes, entre los que se encuentra el Mauna Loa, con una superficie de más de 5000 kilómetros cuadrados. El que es hasta la actualidad el volcán más grande del mundo, se ha puesto en activo por primera vez desde 1984

Aunque la cumbre de este fenómeno natural se encuentra a más de 4000 metros sobre el nivel del mar, su base está situada a una profundidad de 5000 metros, aproximadamente. Esto hace que, desde la base hasta la superficie, haya más de 9000 metros de altura, convirtiéndose en una cumbre más alta que la del Everest. 

El volcán se encuentra localizado en Hawái, una isla que se caracteriza por sus volcanes, entre los que se encuentran: Kīlauea, Kohala o Mauna Loa, entre otros. La puesta en actividad de este último, el pasado 27 de noviembre, ha conseguido que los otros volcanes empiecen a aumentar su temperatura. Diversos expertos aseguran que están conectados entre sí y de alguna manera se han sincronizado. 

Hasta el momento, el volcán no se ha cobrado ninguna vida, pero las autoridades alertan que la catástrofe puede estar al legar debido a que se desconoce de qué manera van a reaccionar. 

Desde 1843 hasta ahora, el volcán Mauna Loa ha entrado en erupción 33 veces (una vez cada cinco años y medio), pero la última erupción fue hace cuarenta años aproximadamente. Esta última erupción ha causado asombro entre los científicos: “Hubo algunos signos de magma brotando en los últimos 10 años, pero no había habido ninguna erupción hasta la fecha”, afirma el científico Andrew Hopper. El experto asegura que no hay riesgo de que dañe ninguna ciudad, ya que la lava se dirige hacia noreste teniendo que recorrer un gran camino hasta llegar a la ciudad más próxima. Lo que sí que advierte es de la peligrosidad de los gases volcánicos que reaccionan con la densa humedad que hay en la isla, desencadenando problemas respiratorios para los ciudadanos.