En 22 minutos con hemos realizado un ranking de las películas del Universo Extendido de DC; desde El Hombre de Acero hasta su incorporación más reciente, Black Adam

Desde su nacimiento en 2013, el DCEU ha atravesado épocas mejores y peores. Ahora que parece reiniciarse con Black Adam toca ordenar sus entregas de peor a mejor.

12. Liga de la Justicia (Joss Whedon, 2017)

Un absoluto desastre. La visión original de Zack Snyder se entremezcla con los retoques y añadidos de Joss Whedon, contratado por Warner después de que Snyder abandonara el proyecto por el fallecimiento de su hija. Solo faltaba un 10% de las escenas por rodar, pero Whedon grabó de nuevo más de la cuenta, y en la sala de montaje se tomaron decisiones cuestionables. El resultado (más allá del infame bigote eliminado por CGI de Henry Cavill), una película sin pies ni cabeza, con escenas y diálogos vergonzosos y que hizo caer a DC más bajo que nunca. 

11. Escuadrón Suicida (David Ayer, 2016)

Otro filme con sonado drama tras las cámaras; su director, David Ayer, lleva tiempo reclamando que esta película no es la que él hizo. En Escuadrón Suicida son también evidentes los recortes realizados durante la postproducción, que lastran a un film ya de por sí flojo. Una trama no muy bien desarrollada y personajes con poco carisma y sin química entre sí, salvándose únicamente la Harley Quinn de Margot Robbie. Además, esta cinta acentuó uno de los mayores problemas de DC: la sobrecarga de CGI. Del Joker de Jared Leto mejor no hablar.

10. Aquaman (James Wan, 2018)

El principal problema de Aquaman es que basa gran parte de su atractivo en un despliegue de efectos visuales que no está a la altura; lejos de lograr la espectacularidad de films como Avatar, Aquaman parece un videojuego. Las escenas de acción, los movimientos de la cámara y hasta la BSO contribuyen a darle esa sensación. Cae en lo ridículo desde las primeras escenas y es casi imposible tomársela en serio, pese a que el guion resulta ser bastante solvente. Al menos están Nicole Kidman y Willem Dafoe para amenizar el rato.

9. Shazam! (David F. Sandberg, 2019)

La primera película buena de esta lista, Shazam! no tiene la carga épica o el tono oscuro al que estamos (o estábamos) acostumbrados en DC; en cambio, apuesta por un tono más ligero y divertido, y es en esa frescura donde radica su encanto. No está bien estructurada, pero se sostiene gracias al carisma de sus protagonistas, Zachary Levi y Asher Angel. Supone además la introducción a una nueva cara de DC que precisamente acaba de expandirse con Black Adam

8. Batman vs. Superman: El Amanecer de la Justicia (Zack Snyder, 2016)

Es muy complicado valorar Batman vs. Superman, ya que se trata de un proyecto muy ambicioso con luces y sombras. En el lado negativo tenemos el enfrentamiento que da título a la película; su construcción y resolución chirrían, al igual que ciertos aspectos de su enfoque (relacionados casi todos con el personaje de Batman, que necesitaba una cinta en solitario antes que esto). En lo positivo, la moralidad y política en torno a Superman se manejan de manera brillante, Jesse Eisenberg se luce y tanto los efectos visuales como la BSO son excelentes. No obstante, si hay algo que engrandece la película es la Wonder Woman de Gal Gadot, con una de las entradas más épicas jamás vistas en el cine de superhéroes. 

7. Black Adam (Jaume Collet-Serra, 2022)

Aún tiene que pasar la prueba más difícil de todas; la del tiempo. Pero aunque haya que esperar para ver como envejece y se asienta, de momento Black Adam se consolida en la mitad del ranking, lastrada por algunos elementos (tercer acto, mal ejecutado) y ensalzada por otros (Dwayne Johnson, Pierce Brosnan). Crítica completa aquí

6. La Liga de la Justicia de Zack Snyder (Zack Snyder, 2021)

Tras una campaña masiva en redes bajo el título de #ReleaseTheSnyderCut, los fans del director consiguieron que Warner lanzara la película que Snyder tenía originalmente en mente, y no la que llegó a las pantallas en 2017. El “Snyder cut” es infinitamente mejor que la versión de Joss Whedon en todo, y si bien no es una película ni mucho menos perfecta (las 4 horas de duración son excesivas, y a veces Snyder es demasiado Snyder, en aspectos como la cámara lenta), sí que es la épica reunión que los superhéroes de DC merecían. 

5. El Escuadrón Suicida (James Gunn, 2021)

La incursión de James Gunn en el DCEU limpió el nombre de su equipo protagonista, redimiendo a algunos de sus miembros originales (el Rick Flag de Joel Kinnaman) e introduciendo a otros nuevos memorables (la Ratcatcher II de Daniela Melchor), y se saldó con mucha sangre y algunas de las secuencias más brutales jamás vistas en DC. Gunn peca de excesivo a veces, igual que Snyder, pero se le perdona porque la aventura en la que mete a su Escuadrón Suicida es deliciosamente salvaje. ¿Secuela para cuándo?

4. El Hombre de Acero (Zack Snyder, 2013)

Con una nueva versión de Superman hace casi diez años se iniciaba este universo, y a día de hoy puede presumir de seguir siendo de lo mejor que ha salido de la factoría. Zack Snyder supo dar una nueva perspectiva, más oscura y compleja, a la historia del personaje y su mitología, alejándose además de las historias de orígenes de superhéroes convencionales. Mucho tuvo que ver en su éxito la elección, perfecta, de Henry Cavill como Superman. No se puede dejar sin mencionar la  BSO de Hans Zimmer, uno de sus mejores trabajos. 

3. Aves de Presa y la Fantabulosa Emancipación de Harley Quinn (Cathy Yan, 2020)

La película que Harley Quinn merecía. Con una Margot Robbie desatada al frente, Aves de Presa es una cinta desenfrenada y extremadamente divertida. Un espíritu libre, como su protagonista, sin la presión ni expectativas de ser un macroevento superheroico, y que se lanza a una aventura alocada en la que Harley sobresale, pero con hueco para traer más personajes entrañables como Black Canary o Roman Sionis (el mejor Ewan McGregor). 

2. Wonder Woman (Patty Jenkins, 2017)

Después del fracaso a nivel comercial que habían supuesto los filmes anteriores (Escuadrón Suicida y Batman vs. Superman), había mucha presión sobre Wonder Woman. La película individual de Diana Prince, que se había ganado a la audiencia en el enfrentamiento entre el murciélago y el kryptoniano, supuso una revolución no solo en DC, sino en todo el panorama de Hollywood. Era la primera vez que una mujer se ponía a las riendas de un proyecto de tal magnitud, y Patty Jenkins desplegó todo su poderío en una historia épica y emocionante que se ganó a críticos y audiencia por igual y reventó la taquilla. Sin embargo, dejando de lado los datos y las puntuaciones, estamos ante una cinta como pocas. Desde escenas como la icónica No Man’s Land hasta la relación amorosa entre Diana y Steve Trevor (Chris Pine), Wonder Woman supo dar al personaje una historia de origen que llevó no solo a su heroína (magnífica Gal Gadot) a lo más alto, sino a todo DC. 

1. Wonder Woman 1984 (Patty Jenkins, 2020)

La película de superhéroes más incomprendida de la historia. Un cuento maravilloso cargado de emoción que se aleja de lo habitual en el género mientras conserva sus mejores características (escenas de acción, entretenimiento de principio a fin…). Patty Jenkins construye una historia con muchas capas: personajes complejos, con matices y a los que se entiende (e interpretados a la perfección por sus respectivos actores); una aventura familiar que tiene al espectador al borde del asiento y con temas que te hacen reflexionar; y a nivel fílmico, una maravilla visual, con escenas que van de la espectacularidad a lo más íntimo. En el centro del todo, una Wonder Woman deconstruida psicológicamente que Gal Gadot hace suya, demostrando por enésima vez quién lleva las riendas en DC. Wonder Woman 1984 es la mejor película del DCEU, y va a ser muy difícil superarla. 

Por Sergio Vega Calderón

Estudiante de Segundo año Periodismo y Comunicación Audiovisual en la UC3M (Getafe, Madrid). Fanático del cine y las series. RRSS: Instagram: srgtargaryen; Twitter: slythwalker_28

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