Una obra semiautobiográfica y una carta de amor al cine, es una de las grandes favoritas de cara a los Óscar de este año
Uno de los directores más aclamados de Hollywood, Steven Spielberg, se une a la corriente autobiográfica, a la que ya se han sumado directores como Kenneth Brannagh o Pedro Almodóvar, con Los Fabelman, su nueva película que ya se ha estrenado en los cines españoles. En este film semiautobiográfico, el director de La Lista de Schindler nos cuenta su primer contacto con el cine y cómo se enamoró de este arte.
La película está protagonizada por el debutante Gabriel Labelle, Michelle Williams (nominada al Oscar a la mejor actriz por su interpretación) y Paul Dano. En el reparto también hallamos a Judd Hirsch, igualmente nominado a los premios de la Academia, en este caso a mejor actor de reparto. El film, tras ganar el Globo de Oro a la mejor película de drama y al mejor director para Spielberg, se postula como una de las grandes favoritas para ganar el Óscar.
Aunque llega ahora a los cines, su estreno fue en el pasado Festival de Toronto. Se ha ganado el favor de la crítica y el público, no obstante, ha pasado desapercibida en taquilla. Pese a que el mundo entero sigue rindiéndose a los pies de Spielberg cada vez que hace una película, y consigue una enorme cantidad de nominaciones a premios, últimamente no consigue que dichos halagos se vean reflejados en el dinero que consiguen sus films. Si bien no ha sido un fracaso tan sonado como lo fue West Side Story, su recaudación ha sido muy pobre.

Esto es terriblemente injusto, porque estamos ante una de las mejores películas de Spielberg en toda su carrera. Ya con la madurez y visión clara de un director veterano y consagrado, nos traslada a su infancia y juventud para contarnos como fueron esos tumultuosos años de su vida en los que se formó como persona y amante del cine. Los Fabelman es un drama familiar excelente y emotivo, sin caer nunca en lo excesivamente sensiblero; y al mismo tiempo es una carta de amor al cine y al arte de hacer películas. Gabriel Labelle está espléndido en el papel protagonista, así como Michelle Williams y Paul Dano como los padres del joven Sammy Fabelman.
Realmente se trata de una historia sencilla, pero Spielberg aporta tal emoción que es imposible no verse conmovido por ella. Él mismo ha confesado que es su obra más personal hasta la fecha, y se nota. Toda la película tiene una magia como la que siente el pequeño Sammy al ver su primer largometraje en el cine. “Las películas son sueños”, dice su madre en un momento dado. Esta sin duda lo es.