En 22 Minutos Con creamos una nueva sección, “RAÍCES DEL SUR” dedicado a la música de Andalucía, con sus distintos géneros y tradiciones, flamenco, copla y cultura se unen en una tierra para dar lo mejor a nivel internacional.

Nuestro primer invitado en esta nueva sección no podría haber sido otro que no fuera, Alfonso Sánchez, un cantante onubense al que la música le llego sin esperarlo, pero menos se esperaba que con tan solo tres discos fuera uno de los artistas más sonados en el mundo de las sevillanas. Un artista que ha conseguido posicionarse como una de las figuras más destacadas de la sevillana, eso sí, con trabajo y esfuerzo en cada uno de sus trabajos que trata con delicadeza, esfuerzo y mucho cariño. Recientemente lo pudimos ver en el programa musical “IDOL KIDS” junto a su hijo Martín, que de momento solo por afición, poco a poco sigue los pasos de su padre, uno de los mayores regalos para el ya consolidado cantante.  

P: Las sevillanas y el flamenco llegaron a su vida en forma de amor tras conocer a su mujer. ¿Cómo fueron esos comienzos?  

R: Efectivamente, cuando conocí a mi mujer, el flamenco y las sevillanas, el folclore en sí, no me gustaba en absoluto, tenía otros gustos musicales, que también sigo conservando de aquella época, el pop, música de las discotecas de los años 90 o 2000, tenía amistades vinculadas al flamenco, pero no me llamaba la atención en absoluto. Al conocer a mi mujer que es rociera me vi en una encrucijada, o me uno o escapo de aquí, pero decidí unirme. Un día estando en su casa, vi una guitarra sencilla de colegio y le pregunte por ella, me dijo que era suya, pero que hacía tiempo que no la tocaba, le pedí que me enseñara, pero ella se negó y mi respuesta fue que o me enseñaba o me apuntaba a una academia ese mismo lunes, y me toco apuntarme a la academia. Todo empezó ahí y como digo, me inyectaron ese “veneno” y hasta día de hoy que ya llevo tres discos y varias colaboraciones con otros compañeros de profesión.  

P: ¿En qué momento decide que quiere dedicarse a la música con el género de las sevillanas? 

R: Empecé con 33 años, solo en algún bar de conocidos y demás, pero como tuve cierto éxito con la gente fui incorporando a músicos, percusión, guitarra, un bajo, etc… Y como teníamos muchos bolos me propusieron la idea de grabar un disco de sevillanas. No todas las sevillanas me gustan, me gustan las que tienen un mensaje en su canción, esas sevillanas lentas que llegan al corazón.  

P: En 2017 llega su primer disco llamado “AS”, siete meses de trabajo que le llevaron a lo más alto de su género musical. ¿Cómo fue ese momento? 

R: Con este disco fui premiado como artista revelación, me dio mucha fuerza para seguir. Quería grabar un disco con varias sevillanas, pero no solo de estas, así salió “AS”, un álbum que contiene siete sevillanas de los diez temas que lo componen.  

Fue una experiencia completamente nueva, yo no sabía cómo era una grabación, yo pensaba que grabábamos todos juntos y luego me di cuenta de que no, que todo tenía su proceso, fue un gran aprendizaje. Aprendí también a controlar la voz, fueron siete meses de grabación que cada día salía del estudio con algo nuevo. Un trabajo de siete meses que mereció la pena, quedo algo muy bonito. Yo el primer día iba con mucho miedo, era algo nuevo, pero me enseño mucho y me ayudo en posteriores colaboraciones que hice con otros artistas. Es muy importante el arreglista que tengas, si él tiene experiencia, todo va sobre ruedas.  

P: ¿Qué supone para usted a día de hoy la música? 

R: Todo, para mí lo supone todo en absoluto, mi vida gira alrededor de ella, más ahora que uno de mis hijos también está empezando. Todos los días sigo pensando y creando cosas nuevas para no encasillarme en una misma cosa.  

P: Este año ha sido reconocido como disco del año por la página “Rocieros por el Mundo” ¿Cómo se siente al ser reconocido con tal premio?  

R: Con mucha alegría, la verdad que lo hemos recibido muy gratamente porque este tercer disco que se llama “Rocío, el legado” se empezó a escribir antes de la pandemia, muy poco antes, entonces hubo un parón, se me quitaron las ganas ante la incertidumbre de que iba a pasar, y una vez ya paso todo, se volvió a retomar con Fernando Romero Balli, autor de todo el disco y amigo, y fue complicado porque para cuadrar todas las colaboraciones siendo distintos sitios, nos ha llevado bastante tiempo, pero ha merecido la pena porque se ha hecho un disco para los Rocieros y ahí está el resultado.  

P: Tan solo tres discos le han hecho falta para ser todo un referente entre los cantantes de sevillanas. ¿Cómo se siente?  

R: Bueno, yo creo que soy una persona un tanto especial, porque todo lo que hago, me gusta hacerlo bien, entonces soy muy concienzudo en todo, en buscar las letras, las músicas… y bueno esto tiene una recompensa, aunque es muy costoso en todos los aspectos, pero bueno ahí estamos e intentaremos seguir trabajando y hacer música durante mucho tiempo.  

P: La saga continua, hace pocas semanas pudimos ver a su hijo Martín, en “Idol Kids”, que consiguió llegar a la final, tu lo acompañaste con la guitarra. ¿Cómo vivió esos momentos, como cantante y como padre?  

R: Ha sido una de las mejores experiencias en mi vida. El tener la oportunidad de estar en una televisión a nivel nacional, habíamos estado en alguna regional de Andalucía, pero era una experiencia que me generaba muchos nervios. Iba con mis músicos, que yo en principio no iba a subir, pero mi hijo quería sentirse de alguna manera más protegido en ese sentido y la verdad que todo fue sobre ruedas. El buscarle las canciones adecuadas para cada programa, los arreglos que se los hice yo, y el conocer a todo el equipo del programa ha sido algo excepcional.

Además, Martín ha evolucionado y aprendido mucho, eso sí, él estaba nervioso pero yo el doble, es un niño que antes de subir al escenario es un terremoto de nervios, pero una vez se sube es como si llevará toda la vida haciéndolo. Sin embargo, yo soy distinto, yo antes de subirme al escenario debo estar solo y hasta que no llevo dos canciones sobre el escenario no entro en mi fase de tranquilidad.  

Martín ahora mismo está estudiando, está preparándose, al final no deja de ser un niño de ocho años que aún tiene que madurar algo más en la música, pero tiene algo que muchos buscan, pero no encuentran y a él le sale solo, tiene como un don para la música, un oído innato. El ya ha colaborado en mi último álbum con dos palos de sevillanas y lo voy subiendo al escenario para que vaya perdiendo ese miedo escénico.  

P: ¿Cuáles son sus próximos proyectos?  

R: Hace poco hemos hecho un proyecto nuevo que se llama “Caramba Carambita” que es un espectáculo tributo a la tumba de los 80, estamos hablando de Los Chunguitos, Los Chichos, Junco, entre otros, aquellos éxitos que se han escuchado siempre y que hoy por hoy siguen. Lo estrenamos en las ferias “Colombinas” de Huelva y fue bastante bien. En noviembre también voy a grabar un single que trata sobre el desamor de Los hermanos Bizcocho, que entrará dentro de mi próximo álbum, aunque saldrá para finales del próximo año.  

P: ¿Qué es lo mejor que le ha regalado su trayectoria musical? 

Quizá no haya uno en sí, hay tres donde no sabría donde elegir. El hecho de compartir escenario y colaborar con artistas que yo he admirado es uno de ellos. El poder acompañar y vivir los comienzos de la carrera de mi hijo Martín sin duda es algo único y por último el poder vivir el calor de unos fans liderados por Coral Domar, presidenta de mi club de fans, es algo que se lleva en el corazón.  

Por Ch Newes