Ultravox es uno de los grupos referenciales de la música y estética de los primeros ochenta. Cuentan con grandes éxitos como The Voice, Dancing With Tears In My Eyes o Hymn. Sin embargo, fue Vienna el sencillo que les catapultó al éxito y hoy, en CURIOSIDADES MUSICALES, te contamos todos los detalles de este gran hit.

HISTORIA Y CREACIÓN

Portada del sencillo Vienna de Ultravox

Vienna es uno de los sencillos que mayor éxito aportó a Ultravox, banda británica de la new wave ochentera dentro del “género” synthpop. El single fue lanzado el 9 de enero de 1981 como tercer sencillo de su cuarto álbum mediante el sello Chrysalis Records.

Junto a Vienna, en el lado B del sencillo, encontramos la canción Passionate Reply. También existe otro sencillo de doce minutos con Herr X como lado B, una versión en alemán de Mr. X, también de Ultravox.

Respecto a las sonoridades que encontramos en Vienna, podríamos decir que son fruto de la mezcla entre instrumentos analógicos, como un piano de cola y un violín; e instrumentos sintetizados, como el Minimoog que hace la línea de bajo; aunque también se utilizó un bajo acústico, el sintetizador de cuerdas Elka Rhapsody 610 o la caja de ritmos Roland CR-78.

Sintetizador Minimoog

Estamos prácticamente llegando al cénit de las sonoridades sintetizadas en 1981 y, sin embargo, los instrumentos que el grupo emplea en esta canción (por ejemplo el Minimoog) aún son bastante rudimentarios en comparación a la gran variedad que encontraremos pocos años después en esa década.

Midge Ure utilizó una guitarra Yamaha SG-200 pasada por el amplificador VOX AC-30. En general, emplearon los instrumentos que podían permitirse económicamente en ese momento.

Fue el patrón de la caja de ritmos creado por Warren Cann, el germen de la canción. En base a esto, Billy Currie y el propio Cann compusieron una obra musical cuya intención era sonar como si hubiese sido compuesta en pleno Romanticismo del siglo XIX. Además, el solo de violín fue inspirado precisamente por las obras del compositor alemán Max Reger.

Así, Ure afirmó que su intención era hacer una canción “pomposa” en el medio, con estrofas más bien vacías, y terminar con un final clásico y exageradamente romántico. Tenían en mente a las composiciones románticas de músicos como Grieg o Elgar. No estaban tratando de hacer una canción exitosa, sino algo diferente, una pieza musical que resultara interesante.

Ultravox. De izquierda a derecha: Warren Cann, Midge Ure, Chris Cross y Billy Currie.

Su forma de componer, como la de prácticamente la mayoría de los músicos, era simplemente desarrollar una idea y toda la instrumentación alrededor, siendo el resultado lo que generase el estado de ánimo y la letra que debía escribirse. Sin embargo, afirman que encontraron rápido la fórmula adecuada de la canción y en pocos días ya la tenían montada.

Por supuesto, la intención de hacer una obra casi del siglo XIX era una especie de broma que los oyentes no supieron captar, quedando obnubilados por la sensación de grandeza y elegancia que transmitía la canción.

Vienna fue concebida como una canción de amor pero muy alejada de la cursilería. Simboliza todo lo que una persona ha vivido en esa ciudad, Viena, con otra a quien amaba. Y, cuando ambas personas se separan, en la ciudad sigue impregnado el recuerdo de aquella relación.

Decidieron escoger la capital austríaca porque sentían que, por sus calles, uno podía experimentar la decadencia de la vida en una manera elegante. Les pareció que, bajo esa apariencia aristócrata, pero misteriosa, una persona podía enamorarse fácilmente.

La letra fue obra de Midge Ure. Hicieron varias pruebas en el estudio antes de saber el rumbo de la canción y, de repente, Midge Ure cantó la frase inicial: Walked in the cold wind, breathing cold in the window panel. Un dato curioso es que la famosa frase que encontramos en el estribillo, This means nothing to me, la pronunció Ure, refiriéndose a la orquestación, a su juicio, demasiado clásica. El productor Conny Plank le sugirió que cantase esa frase.

Midge afirma también que la única frase que tenía clara en su cabeza cuando entró al estudio de grabación era: The feeling is gone, this means nothing to me, oh, Vienna!. El resto de la letra la escribió en el estudio junto al bajista Chris Cross, quien tocaba algunas líneas del bajo con el MiniMoog.

Es cierto que en algunas entrevistas que Ultravox concedió en la época, se menciona que Vienna está inspirada en la película The Third Man (1949), con escenario también precisamente en la capital austríaca. Sin embargo, en años posteriores, Midge asegura que esa afirmación simplemente fue un invento.

Trailer de la película The Third Man de Carol Reed.

Otra influencia que también podría tener la canción es el sencillo The Electrician, lanzado en 1978 por el grupo The Walker Brothers, pero esto lo dejaremos a juicio del lector.

Pese al entusiasmo grupal, la compañía discográfica Chrysalis Records no quería lanzar esta canción como uno de los principales sencillos del álbum, pues la veían demasiado lenta y larga como para recaudar un verdadero éxito. Sin embargo, se convirtió en uno de los mayores hits del grupo, tanto que muchos fans les pedían que también lanzaran otro sencillo con el nombre de su respectiva ciudad.

Fue un gran éxito a pesar de la larga duración. De hecho, en una de sus actuaciones en Top of the Pops tuvieron que interpretarlo en menos tiempo, quitando la sección intermedia entre el segundo estribillo y el solo de violín.

Actuación de Ultravox en el programa Top Of The Pops.

También es destacable su interpretación en el famoso festival Live Aid de 1985, celebrado en el conocido estadio de Wembley. Al contrario que en su actuación en Top Of The Pops, en el Live Aid la canción es tocada en directo, pudiendo apreciar pequeños cambios con el disco. Es una actuación que merece la pena ver:

Ultravox interpretando Vienna en el festival Live Aid, Wembley.

Tras la separación de Ultravox, y después de muchos años, sigue siendo la canción que más se recuerda del grupo, tanto que su cantante Midge Ure aún la sigue interpretando en sus conciertos, como lleva haciendo todo este tiempo.

Mige Ure interpretando Vienna en 2018.

El sencillo alcanzó un gran éxito, pasando cuatro semanas consecutivas en el segundo puesto del “Singles Chart” aunque no logró llegar al número uno. Pese a esto, está clasificado como el sexto sencillo más vendido en Inglaterra y certificado Disco de Oro por la British Phonographic Industry” en febrero de 1981, habiendo superado las quinientas mil copias. En ese mismo año, también ganó el premio “Single of the Year” en los British Awards.

ANÁLISIS MUSICAL

Vienna, Ultravox.

Introducción (00:00 – 00:31)

La canción comienza con un sonido grave distorsionado. Poco después aparece un bombo muy al frente y una caja que se mueve por la parte de atrás, aunque inicialmente la encontramos a la izquierda. Esta caja parece tener reverb, haciendo un efecto como de trueno y aportando más siniestralidad.

Tras varios segundos comienza un sonido agudo de sintetizador, como si fuese viento. Este sonido nos conduce directamente a la primera estrofa.

Estrofa I (00:31 – 01:14)

El comienzo de esta sección está marcado por la entrada de Midge Ure cantando. También escuchamos cuerdas muy agudas, sonando de fondo, doblando al viento sintetizado, que poco a poco va desarrollando su propia melodía.

Dentro de una sola estrofa hay largos silencios entre las frases vocales de Ure. Su voz se escucha clara y nítida, ni siquiera parece tener reverb.

La caja y el bombo del inicio se siguen manteniendo estables, con la misma rítmica.

Estribillo I (01:14 – 01:40)

Unas cuerdas agudas mantenidas marcan el paso de la estrofa al estribillo y la melodía de Midge alcanza su nota más aguda, nada fácil de ejecutar, en ese primer the feeling, descendiendo después a una zona más central adornando su melodía con otra del piano que aparece de forma repentina.

El bajo se mantiene en notas pedales y tanto la caja como el bombo siguen igual de estables. La reverb al revés del platillo da paso a la segunda estrofa.

Estrofa II (1:40 – 2:35)

Se inicia con mayor movimiento en el bajo, lo que parece acelerar el tempo de la canción, y una caja brillante. También parecen efectos láser.

Apreciamos cómo el piano toma protagonismo desplegando melodías, acompañando también a la voz y complementándola. Cuando la voz vuelve a entrar, escuchamos el mismo sonido de viento que encontrábamos en la introducción.

La voz esta vez sí parece tener reverb e incluso en algunos momentos concretos es doblada por un coro.

Estribillo II (02:35 – 03:01)

De nuevo, las cuerdas agudas nos traen a este segundo estribillo.

La melodía de voz es igual que en el estribillo anterior, así como el fondo instrumental, aunque esta vez podemos apreciar una sonoridad de órgano al fondo.

Estrofa instrumental (03:01 – 03:26)

Otra vez la reverb al revés nos transporta a ese riff de bajo que encontramos en las estrofas anteriores.

El fondo musical es el mismo que en la estrofa II, con el piano como gran protagonista, esta vez sin voz.

Las cuerdas agudas nos anticipan otro cambio de escenario, así como el movimiento más rápido del piano en la zona aguda.

Puente instrumental (03:26 – 04:16)

La parte instrumental está liderada por un solo de violín. Max Reger fue un compositor romántico de gran influencia para el grupo, y en el que se inspiraron para realizar este solo.

El violín está pasado por diversos pedales de efectos, principalmente de Electro-Harmonix, junto con un retardo de cinta Roland Space Echo. Para amplificarlo se utilizó una pastilla Barcus-Berry pegada al puente. Más adelante lograron adquirir un violín eléctrico y ya no hizo falta todo lo anterior.

El bajo alcanza su momento de mayor movimiento y la batería se acelera, provocando que la canción alcance un tempo más rápido que el original.

Las cuerdas siguen sonando en el fondo junto al piano que adorna las melodías hasta que, poco a poco, volvemos al tempo más lento original para aterrizar en el estribillo.

Estribillo II bis (04:16 – 04:57)

Llegamos al final de la canción de forma grandiosa, con sonidos de platillo y cuerdas sostenidas.

Al final, el bajo y la batería terminan igual que empezaron.

VIDEOCLIP

Videoclip de Vienna de Ultravox.

Dirigido por Russell Mulcahy, es realmente evocador. Como Chrysalis no les dio el dinero para el presupuesto del videoclip, lo hicieron de forma “casera” entre los miembros de Ultravox y su director antes mencionado.

Fue el segundo videoclip del grupo, después de Passing Strangers.

En ese momento Ultravox estaba pasando por un momento económicamente complicado. De hecho, cuentan que toda la ropa que llevan en el vídeo pertenecía a tiendas de segunda mano, excepto un impermeable de Burberry que lleva puesto Ure.

La mitad de las escenas que aparecen fueron grabadas, paradójicamente, en Londres, en las zonas del Covent Garden y el antiguo Kilburn Gaumont Theatre.

La lápida que se muestra en el videoclip, y que también aparece en la portada del single, pertenece a la tumba de Carl Schweihofer, fabricante austríaco de pianos. Se encuentra en el Zentralfriedhof de Viena, donde se grabó la otra mitad del videoclip. Tristemente, no pudieron grabar en los puntos más referentes de la capital porque fueron en temporada baja y muchos lugares estaban cerrados o en proceso de restauración.

Para la composición de Vienna, el grupo tuvo muy en cuenta el aspecto visual que querían representar, plasmándose todas sus ideas en este videoclip.

Por Marta Iglesias

Musicóloga y cantante. Correo electrónico: martaibx@gmail.com Instagram: @martaibx Twitter: @MartabrocOli

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