La banda madrileña brindó el pasado sábado un concierto idílico en la ciudad olívica, con una puesta de sol que encandiló al público y a los propios integrantes del grupo
Eran las nueve de la noche cuando el sol empezó a esconderse tras las montañas de la ría. La terraza del Auditorio Mar de Vigo terminaba de llenarse para disfrutar de los de Parla con una estampa de ensueño. Los primeros acordes de Más colao que el colacao acercaron a los últimos rezagados a las inmediaciones del escenario. Cerveza en mano y gafas de sol, el público no tardó en ponerse a saltar con todos los temazos de La La Love You.
Muchas personas no dudaron en grabar no solo a los artistas, sino también las vistas que se presentaban a espaldas del escenario. Pero no fueron los únicos en percatarse de la estampa, pues al finalizar la primera canción era el propio Roberto Amor el que expresó lo fascinado que estaba con ella. “Madre mía, qué vistas tenéis aquí. Así da gusto”.

Pronto llegaron las míticas como Irene, Quédate conmigo o Laponia. Canciones de su primer álbum que se instalaron en el colectivo de sus seguidores convirtiéndose en verdaderos himnos (aunque esta última llegó un poco más tarde).
La introducción de La canción del verano la realizó David Merino, cantando ‘a capela’ canciones como las bizarraps sessions de Quevedo o la de Shakira, para finalmente indicar cuál es la verdadera “canción del verano”. Y San Juan pudo ser el 23 de junio, pero La La Love You inauguró oficialmente el verano en la ciudad olívica tras cantar la última nota de esta.
La verdadera explosión
Si el público ya estaba animado llegó Big Bang, provocando una auténtica explosión de emociones incluso en los asistentes que no se sabían la letra, pues la energía de los que sí se contagió enseguida. Los cuatro trozos de pizza fluorescentes que hacían de decorado cobraron sentido con Quiero quedarme para siempre. “¿Y dónde vas tú tan deprisa?…que te he pedido pizza… subo latas del chino, si te quieres quedar”, toda una declaración de intenciones con la que la banda volvió a hacer referencia a las magníficas vistas que rodeaban el ambiente. “Yo también me querría quedar para siempre”, indicó Amor.

El Día de Huki Huki convirtió el concierto en una completa fiesta hawaina, porque aunque no sea de los temas que más se pegaron en su momento, sin duda es especial. Y ahora sí, poco después llegó Himno, una canción creada “para aquellos a los que les hayan roto el corazón”. Y seguro que más de uno y una la sintió de verdad. A esta le siguió La Pócima del Amor, con la que aprovecharon para subir al escenario a gente del público para hacer de representantes de este y que lo dieran todo. Una de sus últimas canciones llegó para ir concluyendo la cita, aunque irónicamente fuera El principio de algo.
El colofón final, como es habitual, lo marcó su tema estrella. “¿Es el fin…? ¡Del mundoooo!” Coreando a gritos estas dos frases, La La Love You se marchó tras culminar el encuentro y convertirlo en una completa fiesta, de la que a día de hoy, muchos seguimos con resaca. Pero de la buena.